Atravesando el país

Hemos llegado a Kara. De esto hace ya más de un día, pero encontrar una conexión a internet aquí es una odisea.

Unos de los muchos togoleses que nos saludaron por el camino. / Antía

Desde que llegamos todo han sido saludos por parte de la población local. Hay que reconocer que la gente nos mira siempre con una gran sonrisa. Y se agradece mucho.

Primer grupo de avanzadilla del proyecto Togo 2012. / Antía

Os presento a la primera tanda del equipo. De izquierda a derecha son Fina, Antón, Jesús, José Carlos, Paco León (sí, como el Luisma), Paco García, Miguel y Fermín.

Tras hacer esta foto mientras echábamos gasolina al autobús/ambulancia que tienen detrás, nos esperaban 9 horas de camino para 412 km. Nos avisaron de que el camino iba a ser largo y tortuoso, pero al final no fue para tanto. La sorpresa fue que habían asfaltado muchas zonas que el año pasado era pista de gravilla con unos baches como piscinas.

Por el camino no paramos de encontrar camiones averiados, atascados o volcados. Para señalizar las averías y como los triángulos todavía están llegando al país, el método tradicional es marcar la carretera con hojas de los árboles, como podéis ver en la foto.

Un camión averiado. / Antía

Nos alojamos en un centro religioso de formación, en un edificio construido recientemente, con habitaciones con cama de matrimonio, mosquitera, ventilador y ¡aire acondicionado! Un lujo vaya…

 

Después de vaciar el material y ordenar un poco, llega el momento de cenar y descansar. Nos acompaña en la cena el padre Rafael, un cura salesiano español que lleva más de 20 años en Togo.

Rafael tendrá su propia entrada en el blog, porque es una persona muy interesante y con muchas historias que contar, fruto de su importante labor docente en Kara .